La ilusión de la Ley, el Orden y la Autoridad
“Para un mago su ilusión debe pasar sin ser advertida por su público, con el fin de que la artesanía de su engaño evite la atención a la realidad. Mientras que el público este distraído, el acto engañoso está no comprometido, mientras que para el incauto, esto se convierte en una realidad construida sobre inexplicable mentira. Es será así, hasta que el incauto se despierte y reconozca la verdad y admita el hecho de que ha sido engañado.”
“El mantenimiento de la credulidad en la ilusión, sin embargo, a menudo es más reconfortante que reconocer secretos del mago.”
Vivimos en un mundo de ilusión, así que muchas de las preocupaciones que ocupan nuestra mente y las tareas que nos llenan el calendario surgen de impulsos implantados para convertirse en alguien o algo que no somos. Esto no es casual; por si no sabías, estamos adoctrinados en una cultura autoritaria corporativa y de consumo que ahora mismo domina la raza humana, estamos entrenados y creemos a fe ciega, que ciertos aspectos de nuestra sociedad son verdades intocables, y se prefieren que las formas particulares de ser y de comportarse.
Los psicópatas quitan poder la gente de esta manera, ellos nos ciegan con incesantes bombardeos de sugerencias y absolutos que se dirigen de modo sistemático para destrozar nuestra autoconfianza y la seguridad en el futuro.
Bansky, el revolucionario artista callejero venerado y esquivo, comentó una vez:
“No podemos hacer nada para cambiar el mundo hasta que el capitalismo se desmorone. Mientras tanto, debemos ir de compras para consolarnos.”
“Las personas que realmente ensucian nuestros vecindarios son las empresas que colocan eslóganes gigantes en edificios y autobuses intentando que nos sintamos unos inadaptados si no compramos su mercancía.”
La publicidad es sólo la punta del iceberg; cuando miramos un poco más allá, vemos que la organización general de la vida se centra en la búsqueda ilusiones y obediencia automática a las instituciones e ideas que no son en absoluto, lo que parecen.
Estamos en un sentido muy real y literal esclavizados, muchos llaman a este sentimiento un tanto intangible de la opresión “la matrix”, un sistema de control total que invade la mente, la programación de los individuos a un patrón de acuerdo con una corriente conformista o versión de la realidad.
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Las más grandes ilusiones que nos mantienen esclavizados a “la matrix”, y que de pronto nos mantiene en un estado de “trance”, se describirán en una serie de post, a continuación para su consideración el primero.
1. La ilusión de la Ley, el Orden y la Autoridad
Para muchos de nosotros, seguimos la ley se considerándola una obligación moral, y muchos de nosotros con mucho gusto lo hacemos a pesar de la corrupción, el escándalo, y la maldad demostrada en repetidas ocasiones, ya que la ley es bastante flexible para aquellos que tienen “el músculo” para doblarla.
Estamos condicionados a buscar justicia en esta vida; y cuando no lo conseguimos sentimos enfado, ansiedad o frustración. En realidad sería igualmente productivo que buscáramos la fuente de la eterna juventud o algún otro mito por el estilo.
La brutalidad policial y la criminalidad de la policía es rampante en los EE.UU y en muchos países tanto europeos como latinoamericanos., los tribunales favorecen a los ricos, y podemos ya incluso pueden conducir nuestra vida privada gracias a la intrusión de la vigilancia estatal, sumándole que todo el tiempo estemos en una estado de guerra permanente; haciendo remembranza de ese estado orwelliano ilegal e inmoral, asesinando y destruyendo culturas y naciones enteras.
El orden social no es lo que parece, ya que se basa enteramente en la conformidad, la obediencia y la aquiescencia que se hace cumplir por temor a la violencia.
En la escuela se nos enseñan una y otra vez que la ley no se utiliza como instrumento de opresión, el control social y el saqueo; pero en la práctica, vemos que es todo lo contrario, y que más vale forman parte de un adoctrinamiento falso, hipócrita e injusto.
Cuando la propia ley no se ciñe a la ley, no hay ley, no hay orden, y no hay justicia, la pompa y la parafernalia de la autoridad son simplemente un encubrimiento de la verdad, que el actual orden mundial legitima pare el control y el abuso.
La Ley Desde Otro Punto De Vista
En un post anterior (UNA MIRADA CRITICA SOBRE ALEISTER CROWLEY), señalaba la etimología de la palabra ley:
“La palabra Ley, bien del latín lex , palabra que se refería a la formula (regla) de mezclar metales, en especial, la cantidad de oro que debían llevar las monedas romanas (alquimia?); pero esta es una definición secundaria y más tardía. La palabra lex y legis tienen un origen más religioso, y tiene que ver con las formulas elegidas para realizar un rito; que inmediatamente pasaron al ámbito jurídico para designar lo que todos conocemos por ley.
La Lex, se diferencia del ius (derecho), ya que ius se deriva de la naturaleza, la lex es una norma establecida por convención, y se diferencia de los mores (normas que dependen de la costumbre) y por eso la lex es necesario que se formule y se mantenga por escrito.
Y si nos remontamos más a la antigüedad en las culturas del Próximo Oriente Antiguo son los dioses quienes dictaban las leyes a los hombres, por eso, “las leyes son sagradas”, por ese motivo el dios Samash, el dios sol, dios de la Justicia, es quien entrega las leyes al rey Hammurabi de Babilonia (1790-1750? a. C.).”
Entonces me surgen en mi algunas preguntas, que quisiera compartir con ustedes:
¿Acaso seguiremos dependiendo de esos “dioses de las leyes”?
¿La clase política, no vendría a ser esos “aurigas” que llevan a los pueblos a donde el “verdadero poder” quiere?
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